Maíz forrajero INIAP- 180, fuente excepcional para ensilado e importante alternativa alimenticia para ganado lechero

Abstract

Conseguir más productos ganaderos por hectárea constituye un importante objetivo, que es preciso alcanzar con costos de producción bajos. Para ello es fundamental disponer, a lo largo de todo el año, de una alimentación en cantidad y calidad. Parte de los forrajes obtenidos en las épocas de abundancia deben ser conservados, para que el ganado lo consuma en los momentos de baja productividad de las praderas, específicamente cuando el desarrollo de las plantas es muy escaso, como consecuencia de la sequía o excesos climatológicos, que para nuestra serranía son los meses de julio, agosto y septiembre. Resalta como principal procedimiento para la conservación de forrajes, el ensilaje de maíz, porque permite obtener mayor cantidad y calidad de alimento por hectárea, reduce muchas de las mermas por lluvia y otras pérdidas que se producen en la preparación de otras formas de conservación. El ensilaje por fermentación es un proceso natural que busca conseguir dentro de la masa ensilada una concentración suficiente de alimento fermentado, producido como resultado de la presencia de microorganismos en el maíz picado. El ensilado de maíz forrajero INIAP-180, hace posible el aprovechamiento de muchas especies forrajeras y es el procedimiento ideal para conservar forrajes que se obtienen en muy poco tiempo, dejando libre el terreno para otro cultivo